La legionella
La legionella
30 años de experiencia junto a nuestros clientes con el análisis y control de la Legionella.
Laboratorio certificado.
Laboratorio certificado.
Con la entrada en vigor del Real Decreto 487/2022, se ha reforzado la normativa de prevención y control de la bacteria en instalaciones de agua.
Entre los cambios más importantes, se establece la obligatoriedad de que los análisis de Legionella sean realizados exclusivamente por laboratorios acreditados por ENAC bajo la norma ISO 17025, garantizando así la fiabilidad y precisión de los resultados.

Sistemas de gestión de calidad

Sistemas de gestión ambiental

Acreditados por ENAC bajo la norma 17025

Nuestro laboratorio cuenta con una amplia experiencia en el análisis de Legionella spp., incluyendo su detección, recuento y serotipado, asegurando el cumplimiento de la normativa vigente y ofreciendo un servicio de máxima calidad para la tranquilidad de nuestros clientes.
Legionella es una bacteria ambiental que prolifera en sistemas de agua, especialmente en temperaturas entre 20°C y 45°C.

Principales enfermedades
Principales enfermedades
¿Qué enfermedades provoca la legionela?
– Enfermedad del Legionario: Infección pulmonar que provoca neumonía con fiebre alta.
– Fiebre de Pontiac: Un síndrome febril agudo y autolimitado, sin complicaciones respiratorias graves.
¿Cómo se contraen?
Se contraen a través de las vías respiratorias por inhalación de aerosoles o por aspiración de agua que contiene la bacteria. No puede ser contraída bebiendo agua contaminada con el agente, ni por contagio interpersonal. Tampoco se tiene evidencia de la existencia de reservorios animales. Los aerosoles se forman a partir de pequeñas gotas que pueden generarse al pulverizar el agua o insuflar burbujas de aire a través de ella. A menor tamaño de gota, mayor es su peligrosidad, ya que las de diámetro inferior a 5µm llegan fácilmente a las vías respiratorias inferiores.
Factores que aumentan el riesgo
Fuentes de comunicación comunes
El estudio exhaustivo de brotes epidémicos ha revelado que en la práctica las fuentes de infección más frecuentes son: los circuitos de agua caliente (en especial los de los grandes edificios con circuito de retorno y grandes depósitos acumuladores), las torres de refrigeración hídrica y condensadores evaporativos y las bañeras de agua agitada por aire a presión (spas y jacuzzis).